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El VIH ha transformado mi capacidad de crear y mi empatía

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  • Categoría de la entrada:Ruta 2022

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Irene A Picallo es una mujer joven, tiene 23 años y recientemente, en el 2020, la diagnosticaron con el VIH.

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Irene A. Picallo es una mujer joven, tiene 23 años y recientemente, en el 2020, la diagnosticaron con el VIH. La conocí como ahora se acostumbran las relaciones humanas: por redes sociales.

Contacté con ella por WhatsApp y nuestra siguiente reunión fue por Zoom. Sí, ella, como cualquier otra persona joven de su época, es una experta en las nuevas tecnologías de la comunicación. Nuestra primera conversación se centró principalmente en dos ámbitos: el VIH y el cine. Así supe que, desde los cinco años, se sentaba junto a su abuela a ver los grandes clásicos cinematográficos como ‘Centuarios del Desierto’ o ‘Lo que el viento se llevó’, dos películas que le fascinan y que le despertaron, entre otras, su amor al séptimo arte. También me compartió su diagnóstico positivo al VIH, sus reflexiones en torno a la infección y la pasión por defender los derechos humanos.

En esa primera cita, surgió la propuesta de esta entrevista para la campaña #YoTrabajoPositivo Sin discriminación por VIH, en la que Irene es una de las protagonistas. Cuando ella narra su historia, lo hace con un tono de voz tranquilo y hasta tímido. No obstante, cuando se trata de dar su opinión o abordar un tema que la apasiona, su voz y semblante, cambian. Se transforma, mira fijamente a los ojos y dice las cosas sin tapujos, con una gran fuerza interior con la que se gana un espacio en el activismo del VIH, en este siglo XXI.

El escenario

El escenario donde sucede esta historia es Berlín, cuando ella estaba haciendo un proyecto de videoarte junto a una amiga: “Me infecté con el VIH hace dos años, en plena pandemia de la Covid-19”, comenta. “Estaba en una relación cerrada con una mujer, y por la falta de información, creía que entre dos mujeres no había posibilidad de infección al tener relaciones sexuales. No fue así, me comencé a sentir mal y me hice la prueba. Tras el resultado positivo, me bloqué por completo. No dije nada a nadie. Salí de Berlín sin decir nada y de la misma manera llegué a Coruña y de ahí a Barcelona, sin cotárselo a nadie hasta que comencé a sentirme muy mal.”

En ese momento fui a Drassanes a pedir ayuda y, después de un mes en tratamiento, todo cambió, me comencé a sentir mucho mejor de salud. Además, ya para ese entonces, me había acercado a la organización Stop en donde encontré la información que necesitaba, pero fueron momentos duros, estaba bloqueada totalmente”.

La toma

‘Retrato de una mujer en llamas’, así se llama otra de las películas que Irene pone en el top5 de sus films favoritos. Es una historia de amor y drama, ambientada en la Bretaña costera del siglo XVIII, que cuenta la historia de un romance prohibido entre una aristócrata y una pintora encargada de pintar su retrato.

No, esa historia no tiene que ver con la de Irene, o hasta ahí no me contó, pero sí hizo hincapié en hablar sobre el amor lésbico y los derechos LGTBI+. Sin embargo, yo me centré en continuar conversando sobre sus reflexiones en torno a vivir con el VIH.

“Entiendo perfectamente que el discurso actual sea decir que no pasa nada, que si te tomas una pastilla al día puedes seguir con tu vida sin problemas. Lo comprendo, pero considero que hay matices porque no todos los cuerpos son iguales y aún existen efectos secundarios. En mi caso, tengo artritis psoriásica y eso me afecta de vez en cuando. Por ello, tomo algunas medidas más estrictas para cuidarme”.

“Además, tenemos que ser conscientes que en algunos países no hay acceso a los tratamientos, o las condiciones de salud son diferentes, por tanto, las personas con el VIH no siempre están bien, y menos las que ya pasan de los 50 años.”

Próxima escena, el ámbito del trabajo y el VIH

“Antes del VIH tenía una relación muy tóxica con el trabajo, comía fatal, llevaba un estilo de vida horrible y me mataba trabajando. Ahora me he dado cuenta de que no somos imprescindibles, que no vale la pena matarte y mi prioridad soy yo. El VIH me ha enseñado a cuidarme, voy al gimnasio, como bien y aunque me encanta mi trabajo, también me tomo el tiempo para estar bien conmigo misma.”


Por otra parte, el VIH cambió mi mundo para siempre e hizo que tuviera una nueva realidad y me permitió conocer otras realidades, a otras personas a las que nunca hubiera tenido acceso, todo ello enriqueció mi forma de ver la vida y con ello también soy mejor profesional. Considero que soy más empática, más inclusiva y mi trabajo se ha enriquecido con nuevas vivencias y conceptos.”

Su película, su creación

 

“No me gustan las películas de drama sobre el VIH. No me gusta ‘Philadelphia’, por ejemplo, me parece muy dramática y cada vez me gusta menos ¿Qué cómo sería la película que yo haría? Lo tengo claro: sería una mezcla de ficción y de documental. Los personajes serían femeninos, no se nos olvide que más del 50% de las personas en el mundo son mujeres y tenemos mucho que decir”.

“Hablaría también del estigma y lo complicado que es tener una buena salud mental. La haría muy al estilo de la directora de cine Claire Denis.”

No cabe duda de que a Irene le fascina el cine. Se ve que se le ilumina la mirada. También me ha quedado claro que sus amistades la quieren, la respetan y la cuidan. Tiene a su alrededor a un grupo de profesionales del mundo audiovisual con quienes crea, comparte su vida y con quienes espero realice sus sueños de creación fílmica.[/vc_column_text][vc_empty_space height=”60px”][/vc_column][/vc_row][vc_row bg_type=”bg_color” css=”.vc_custom_1666623246779{margin-right: 1% !important;margin-left: 1% !important;padding-top: 10px !important;padding-right: 10px !important;padding-bottom: 10px !important;padding-left: 10px !important;}” bg_color_value=”#f5f5f5″][vc_column][ultimate_heading main_heading=”Sobre Trabajando en Positivo” heading_tag=”h3″][/ultimate_heading][vc_empty_space][vc_column_text]Es una red de 19 entidades presentes en 12 Comunidades Autónomas que trabajan en la respuesta nacional al VIH en España.

Compagina el apoyo a las personas con VIH a la hora de defender sus derechos laborales y de ampliar sus competencias profesionales y personales necesarias para el acceso al empleo, con la sensibilización y concienciación de los agentes implicados en el ámbito laboral. Además, apoya a empresas para mejorar su compromiso social en las áreas de derechos humanos, gestión de la diversidad, igualdad de oportunidades y no discriminación, así como en el área de acción social.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

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